"En el
cumplimiento de su primer
Aniversario de su retiro del plano
físico, Yaco Albala "El Mahatma de
Occidente"
nos bendice con este
bellísimo Legado; "En el Nombre de
Dios", uno de sus últimos escritos
antes de su despedida. Sin su
enseñanza, su profunda sabiduría y
Amor, nuestra fundación no sería una
realidad. Solo nos resta en nombre
de todo el equipo de
www.fundacionpea.org decirte con
todo respeto:
"GRACIAS MAESTRO"
Ve y dile a mi Pueblo que se reúna a
los pies de la montaña. Allí les
daré instrucciones.
Los colmaré de bienes y gracias, y
en honor a mí, serán consagrados y
exaltados.
Les daré larga vida y los haré
entrar en la Tierra de Promisión y
allí darán testimonio de esta
verdad.
Los reúno para que consagren Mi Obra
y por Mi Voluntad harán todo tipo de
hazañas, porque Yo estaré con
ustedes.
Cada día de vuestras vidas
celebrarán esta Alianza y ésta será
por los siglos de los siglos hasta
que se presenten ante el Portal de
Mi Reino y vivan en Él Eternamente.
Los he traído a este lugar para que
juntos celebremos el comienzo de
esta Nueva Edad que habrá de ser de
Gloria para la Humanidad.
En este lugar sagrado será colocada
la Piedra Fundamental de la
Eternidad, que iluminará a todos los
pueblos de la Tierra y desde donde
podrán contemplar los Mundos de Mi
Creación.
Aquí comienza la Nueva Historia y
así les concedo la Nueva Tierra.
Id y proclamad esta verdad que será
esperanza de todos los hombres,
cubran todos los rincones e la
Tierra y hagan llegar Mi Voz, y en
Mi Nombre anuncien que ha llegado la
hora de consagrar la vida que les he
dado.
Pongo ante ustedes los manifiestos
de Mi Ley que están escritos en el
Espacio, en la Luz y en vuestros
corazones.
En ellos está expresada Mi Voluntad
y en ellos encontrarán todas las
respuestas.
La Tierra Prometida es hoy el
Planeta que les concedo, como
ustedes son hoy la Humanidad
elegida.
En esta Tierra vivirán y crecerán, y
vuestra descendencia me honrara en
Espíritu y en Verdad, y Yo los
acompañare A Lo Largo de la
Existencia, y Así Será por Siempre
Jamás.
* * *
En esta etapa de nuestra vida en el
mundo deberán estar atentos y
concentrar todas sus fuerzas para
superar las adversidades que vuestro
planeta deberá atravesar.
Los puros de corazón no deben temer
porque serán protegidos y guiados.
Yo les enviaré Ángeles que en Mi
Nombre les dirán qué caminos tomar y
qué hacer.
Aún el momento no ha llegado pero
está cerca. Deben tomar las
precauciones necesarias y dirigirse
a los lugares seguros de la Tierra
pero este viaje no es solamente
físico.
Las distancias que atraviesen serán
tiempos de vuestra propia existencia
y así, cargados de vuestros propios
milenios, emprenderán el viaje.
Las dificultades serán las formas
por las cuales vuestro pasado se irá
actualizando y adaptando.
Mi mano los guiara y los Ángeles les
hablarán al oído. Presten la debida
atención a sus voces, ellos les
hablarán a través del viento,
inclinando una flor o pondrán
palabras en bocas humanas, aún
siendo ignoradas por quienes las
pronuncien.
Serán guiados hacia los lugares
escogidos de la Tierra y no tendrán
otra disciplina que Mi Nombre ni
otra religión que Mi Aliento.
Los cantos de alabanza serán la luz
del caminante y como pioneros de
vuestros propios pasos, señalarán el
camino.
Yo estaré en sus descansos y los
Ángeles en vuestra actividad, y una
vez establecidos, escucharé sus
plegarias y me reuniré con vosotros
en el Templo de la Naturaleza.
Allí trascenderán sus formas humanas
e irán recuperando lo que fueron
hasta que presientan vuestra imagen
y semejanza en Mí.
* * *
Cuando los tiempos lleguen estarán
abocados a la penitencia y a la
esperanza.
Estarán reunidos al pie de la
montaña y Yo estaré con ustedes.
Verán transcurrir los
acontecimientos y comprenderán por
qué fueron salvos. Los hechos
pasarán, el mundo se normalizará y
la Vida en la Tierra se consagrará a
Mí.
Así habrá de nacer la Nueva Edad, la
Edad tantas veces anunciada por los
hijos que envié a vuestro mundo.
Ellos estarán nuevamente con
vosotros y los guiarán en los
primeros pasos, muchos los
reconocerán y muchos los seguirán.
Una Nueva Tierra está ante vosotros
y una Nueva Vida también. Síganla
porque de Mí Viene y construyan un
altar allí donde vuestro corazón
esté.
Yo pondré bendiciones en él y él
guiará vuestros pasos.
La Tierra presenciará el mayor éxodo
de su historia, en todas partes del
mundo los pueblos se levantarán de
sus pueblos e irán en busca de sus
lugares sagrados.
Cuando los pueblos de la Tierra se
hayan establecido, cuando hayan
aprendido a convivir en el amor que
les he dado, pondré Los Pies en la
Tierra.
A vosotros les encomiendo agrupar a
Mi pueblo, la Ley que les daré la
escribiré en vuestros corazones y
cada uno la encontrará en el lugar
donde les concedí la Existencia.
Consagrar la Tierra es vuestra
misión, poblarla teniendo como
horizonte el Universo es vuestra
misión, educar a las plantas y a los
animales es vuestra misión, aprender
a leer en el Espacio y en la Luz es
vuestra misión.
Cuando todo esto sea logrado les
enviaré a Mi Hijo muy amado. Él les
enseñara sobre los Cielos y la
Tierra, los hará descansar en las
Moradas Celestes y cual palabras en
Mi Nombre, aprenderán el idioma de
las Esferas y así los Cielos se
alegrarán de vuestra llegada.
* * *
Antes de crear el mundo repose en el
espacio del Paraíso.
Lo dote con las cualidades que
preceden a la construcción de los
mundos, le conferí la alegría que
significa crear y le concedí la
reflexión que precede a su Creación.
Luego dialogué con Él y le conferí
posteridad, y una vez que los
elementos se unieron, los lancé a la
Creación, no sin antes cualificar
las Existencias que habrían de
habitarlo.
Así nació el Mundo y todo cuanto
éste contiene.
* * *
Vivan en Mi Gloria y de Mi Gloria.
Observen como la naturaleza es
obediente de Mi Voz, como los Cielos
son sensibles a Mi Mirada, como el
Espacio registra Mis Mandatos, como
la Tierra Me recibe y como la
Humanidad Me espera.
He escuchado su clamor y he
dispuesto que en Mi Nombre se
modifique su destino.
He llamado a los Nobles del Mundo y
les he encomendado la tarea de
organizar la Tierra.
Los he convocado con anterioridad y
les he dado las instrucciones
necesarias, los he capacitado para
recibir el poder que habrán de
utilizar como mediadores y les he
permitido que en su momento puedan
recordar ese diálogo como así la
morada en que ha acontecido.
Por lo tanto hagan uso de lo que les
di, sepan que los elementos de la
naturaleza pueden prestarle
obediencia, sepan que pueden
modificar el curso de los
acontecimientos y sepan que más allá
de todo cuanto suceda, cuentan con
mi Eterna Bendición.
Yaco
Albala
|